Mario Calvit dona obra a la Biblioteca Nacional

Calvit 6

María Magela Brenes, directora de la Biblioteca Nacional, recibe obra del maestro Mario Calvit.

La colección pictórica de la Biblioteca Nacional Ernesto J. Castillero R. está compuesta por obras de más de cuarenta artistas, entre ellos maestros como Juan Manuel Cedeño, Carlos Endara, Ciro Salvador Oduber, Guillermo Trujillo, Manuel Montilla, Olga Sinclair, entre otros, según detalla el catálogo divulgado en el año 2017.

En el último tercio del año pasado Silvia Calvit anunció a la directora de la Biblioteca Nacional, María Magela Brenes, que su esposo Mario Calvit donaría una de sus obras a esta casa de la memoria documental de Panamá.

Cumpliendo con su palabra, el miércoles 6 de febrero, el maestro Calvit recibió a la Directora en su residencia. El artista ya tenía seleccionado un paisaje pintado en acrílico sobre tela, de dimensiones 30 x 27.

Se trata de una imagen que es la marca inconfundible de Calvit. De manera muy calmada y solemne, el creador explicó que después de sacar varias piezas y analizar cuál sería ese regalo especial que haría a esta institución, decidió que el paisaje era lo más significativo, ya que es de sus imágenes favoritas, a la par de los caballos y los arlequines.

“Es uno de los temas que más disfruto de la pintura. Me gusta hacer énfasis en las distancias, para que el observador sienta los elementos que adornan la obra”, detalló con cuidado el artista mientras hacía la entrega.

Esas palabras que describieron con precisión sus pinceladas estaban llenas de emoción. Pareciera como si estuviera recordando el momento justo de cada trazo.

En esta pequeña reunión estuvo presente Nancy Calvo, la curadora de la pinacoteca de la Biblioteca Nacional, quien es la responsable de ubicar la pieza en el lugar adecuado.

Para la Biblioteca Nacional es un honor recibir esta obra de arte. La Directora se refirió a la labor de esta entidad como protectora de la memoria documental, destacando que cada pintura que allí reposa, incluido el nuevo Calvit, forma parte de ese patrimonio que se protege con tanto cuidado y celo.

Brenes valoró la selección del maestro, tomando en cuenta que se trata de algo tan inspirador y significativo como lo confesó el artista: una obra con misterio, color, que expresa lo que él quería decir.
Para la directora de la Biblioteca Nacional es grato conocer que otros artistas han decidido aumentar el valor de la colección permanente que aquí reposa. Todas las piezas se reciben son consideradas verdaderos tesoros.